Emmanuel

HISTORIA DE EMMANUEL

El 28 de octubre de 2022 comenzó un camino de dos años, que parecía largo al inicio, pero pasó rápido entre tantas ocupaciones propias del tratamiento. 

A Emmanuel con 3 años le empezaron a salir petequias en su cuerpo, luego le siguió un malestar de gripe que fue empeorando con fiebre, mal estado general y por último vómito lo que nos hizo llevarlo al hospital. Papá estaba convencido que algo más le sucedía al niño porque no lloraba como otros días.

Durante la revisión me preocupé, como madre, al escuchar todo lo que la doctora diagnosticaba en el niño cuando sólo lo habíamos llevado por vómito. Posteriormente lo revisó otro doctor y fue ingresado en la UCI, lo cual nos preocupó más y hasta me llegué a sentir culpable.

Después de dos días de pruebas nos dieron la peor noticia, nuestro hijo tenía leucemia linfoblástica aguda.En este instante todo se paraliza y lo que se siente no he podido describirlo con palabras en su totalidad. Sólo sé que es muy doloroso.

Sus abuelos en el extranjero no pudieron en ningún momento acompañarnos. Sin embargo, sus oraciones y las llamadas para alentarnos nos dieron mucha fuerza.

Emmanuel inició el tratamiento tras el diagnóstico y los tiempos se fueron cumpliendo de acuerdo con los pronósticos de los médicos.

Durante las sesiones de quimioterapia hicimos relación con las familias con las que coincidimos en el hospital y nos alegraban los progresos de todos. Los días de ingreso, jugábamos por las tardes con plastilina u otros juguetes, con los voluntarios y Emmanuel se subía a los correpasillos que hay en la planta.

En noviembre de 2024 finalizaron los dos años de tratamiento con quimioterapia y en febrero de 2025 terminó con el antibiótico.

Como padres estamos muy agradecidos a los médicos y al personal sanitario que acompañaron a Emmanuel durante todo el proceso y hasta su recuperación.

Nunca tendremos palabras que expresen nuestro agradecimiento, porque hacen un trabajo enorme por la vida de los niños y por la investigación del cáncer infantil.

Lo que se siente no he podido describirlo con palabras